¿La belleza es la felicidad de una persona? era la pregunta que se hacía David, un joven que en su crecimiento y desarrollo sufre por despreciado y apartado al no ser tan bello físicamente. Sus amigos, como los llamaba él creyendo sínicamente que lo aceptaban y que no les importaba su aspecto pero era todo lo contrario, se burlaban a sus espaldas, lo trataban y le hablaban por puro interés ya que era el más listo de la clase y así podrían tener facilidad en los trabajos.
Las personas que conocen a David aseguran su fealdad física, pero admiten que es un muchacho de gran corazón, bello y hermoso en su interior, que se destaca por su espíritu de ayuda y colaboración.
Cuando David inicia su etapa juvenil sufre por aceptar su realidad, la verdad que era tan notoria, una verdad que lo hacía tan infeliz. Es que al llegar esta etapa todo joven se preocupa por sentirse bien, verse bien y estar en la onda, todo lo contrario de él, quien no era nada creativo con su pinta, no se preocupaba por su aspecto solo por sus estudios y afirma que la esencia de alguien es su saber.
Tiempo después viene lo más doloroso para David, que se enamora de una linda chica no correspondida. Ella es Katherine, una hermosa niña presumida y antipática que con sus atributos hipnotiza a este joven, llevándolo a creer que era una niña tierna y dulce porque al mirar sus ojos claros resalta la pureza y la ternura de sí y en su cabello dorado desprende destellos que la iluminaban y la hacía ver angelical, pero la realidad es dura y a veces las personas no son como parecen ya que ella era todo lo contrario. Lo que este chico no imaginaba era que Kathe como le decían junto con sus amigas eran quien más criticaban lo feo y su aspecto nada agradable.
Luego los chicos del salón tientan a Kathe a engatusar y acabar de enamorar a David con una apuesta y un premio muy favorable para ella lo que le hace tomar una decisión afirmativa. En el transcurso de los días Katherine envuelve a David, poco a poco el termino por entregar todo de sí, era el niño más tierno y dulce que se hubiera podido ver, dedicado y cariñoso pero todo no fue color de rosa y el final fue triste. David en su fiesta de grado invita a Kathe a ser su pareja por ser su novia y ella acepta solo por que allí iba a desenvolver todo este enredo.
El día de la fiesta llego, para David era un día esperado por su graduación obviamente recibe el título de mejor estudiante y por que la niña de sus sueños iría con él a la fiesta mientras que a Katherine y los demás solo les importaba hacer quedar en ridículo a el pobre de David y así fue, este chico gritaba a los cuatro vientos que era el hombre más feliz del mundo por la fortuna de tener una novia tan hermosa como ella, Katherine mientras tanto se monta a la tarima y le hace sentir mal, dice que nunca había besado a ese esperpento, que jamás lo haría y le preguntaba sarcásticamente a David que si en realidad pensaba que le estaba hablando en serio, que no fuera iluso, que había sido una apuesta para demostrarle una vez más a todos que podía hacer lo que se le antojara y con voz de risa le despide y le desea lo peor. Él no lo podía creer, la niña de sus ojos, la más dulce y bella, fue tan increíble como cambia un sentimiento hacia una persona de un momento a otro que cuando se dio cuenta solo se declaro EL HOMBRE MAS INFELIZ DEL MUNDO.